Para localizar un punto P en el Plano cartesiano se toma como referencia el origen a partir de él, se avanza tanto como lo indique el primer número del eje X (abscisa) hacia la derecha o izquierda, según sea su signo, y a partir de la nueva posición se avanza hacia arriba o abajo, según lo indique el signo del segundo número del eje y (ordenada).